El ciclo lectivo 2025 trae consigo cambios significativos para las escuelas públicas de Texas. Desde la prohibición del uso de celulares en las aulas hasta la obligatoriedad de exhibir los Diez Mandamientos, las nuevas leyes impactarán profundamente la experiencia de estudiantes, padres y docentes.
Prohibición de celulares: Adiós a la distracción en clase
Una de las medidas más destacadas es la prohibición del uso de teléfonos celulares durante el horario escolar. Esta ley, impulsada por la preocupación sobre la distracción que generan los dispositivos móviles, busca fomentar la interacción entre los alumnos y mejorar la concentración en el aula.
Si bien algunos estudiantes expresan su inquietud por no poder comunicarse con sus familias en caso de emergencia, las autoridades educativas confían en que esta medida contribuirá a crear un ambiente de aprendizaje más propicio.
Los Diez Mandamientos en las aulas: Un debate sobre la laicidad
Otra ley controvertida es la que obliga a las escuelas a exhibir los Diez Mandamientos en las aulas. Esta medida ha generado un intenso debate sobre la separación entre la Iglesia y el Estado, y plantea interrogantes sobre la libertad religiosa en el ámbito educativo.
Inversión en educación y aumentos salariales para docentes
En un contexto de años de estancamiento en la financiación estatal, el sistema educativo público de Texas recibió un impulso de 8.500 millones de dólares. Esta inversión se destinará, entre otras cosas, a mejorar los salarios de los docentes, con aumentos que oscilan entre los 2.500 y los 8.000 dólares, dependiendo de la experiencia y el tamaño del distrito escolar.
Más allá de los celulares y los mandamientos: Otros cambios importantes
Además de las leyes mencionadas, la legislatura texana aprobó un programa de vales escolares de 1.000 millones de dólares que permitirá a las familias utilizar fondos públicos para pagar la educación privada de sus hijos. También se prohibieron las iniciativas de diversidad, equidad e inclusión (DEI) en las escuelas K-12.
El nuevo ciclo escolar en Texas se presenta como un período de transición y adaptación. Estudiantes, padres y docentes deberán familiarizarse con las nuevas leyes y regulaciones, y trabajar juntos para garantizar una educación de calidad para todos.