La canícula, un fenómeno climático caracterizado por altas temperaturas y disminución de lluvias, impacta significativamente la salud pública. Aunque tradicionalmente asociado a México, comprender sus efectos y medidas preventivas es crucial en un contexto de cambio climático global.
¿Qué es la Canícula y cómo se produce?
La canícula es un periodo de calor intenso que se presenta durante el verano, generalmente entre julio y agosto. Se produce por la disminución de las precipitaciones y el aumento de las temperaturas, pudiendo superar los 37 grados Celsius. Este fenómeno se debe a la influencia de los vientos alisios que impiden la formación de nubes.
Aunque el nombre proviene de la constelación del Can Mayor y su estrella Sirio, cuyo amanecer coincidía con el periodo más caluroso del año, el fenómeno es una realidad tangible con efectos directos en la salud.
Impacto en la Salud: Riesgos y Síntomas
Las altas temperaturas representan un riesgo para la salud, especialmente para niños, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas. El golpe de calor, una condición grave que ocurre cuando la temperatura corporal supera los 40 grados, es uno de los principales peligros. Sus síntomas incluyen deshidratación, disminución de la frecuencia cardíaca, baja presión arterial y menor flujo sanguíneo.
Otros síntomas a tener en cuenta son irritabilidad, fiebre, náuseas y fatiga. Es fundamental no ignorar estos signos y tomar medidas preventivas.
Medidas de Prevención ante la Canícula
- Hidratación constante: Beber abundante agua, incluso sin sentir sed.
- Evitar la exposición al sol en horas pico: Reducir la actividad física intensa durante las horas centrales del día.
- Usar ropa ligera y de colores claros: Facilitar la transpiración y evitar la absorción de calor.
- Consumir alimentos frescos: Frutas y verduras ayudan a mantener la hidratación.
- Prestar atención a los grupos vulnerables: Niños y adultos mayores requieren cuidados especiales.
Canícula en Argentina: ¿Qué esperar?
Si bien la canícula se asocia principalmente a México, el cambio climático global implica que fenómenos similares puedan ocurrir en otras regiones, incluyendo Argentina. Estar informado y preparado es fundamental para proteger la salud y el bienestar de la población.
Es importante estar atento a los informes meteorológicos y seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias para prevenir los efectos negativos de las altas temperaturas.